Realmente no somos conscientes del peligro de probarse ropa en las tiendas. ¿Cuántas veces nos hemos probado ropa en un probador de una tienda?, seguramente miles de veces.
Existen infinidad de microorganismos dañinos para nosotros que residen en los probadores de las tiendas e ignoramos completamente.
Ropa contaminada
Un estudio detectó la presencia de patógenos en prendas de ropa nuevas sin estrenar procedentes de diversas tiendas. Se encontraron la presencia de estafilococos, que son microorganismos que están presentes en la mucosa y en la piel humana. Y en bañadores o ropa íntima también se encontraron microorganismos de origen vaginal o fecal.
Todos estos restos de microbios son procedentes de las heces, la piel y las secreciones respiratorias.
¿Cómo se contaminó la ropa?
Podríamos pensar que la ropa se contamina durante el proceso de fabricación o en el proceso de embalaje y transporte hacia las tiendas. Pero parece ser que no es así.
El origen de los microbios procede de los probadores de las tiendas, donde estos «bichitos» saltan de la persona al tejido en el momento de probársela.
¿Qué debemos hacer para evitarlo?
El doctor Casals, del Hospital Clinic de Barcelona, asegura que los microorganismos de la ropa no son infecciosos salvo que se vea a simple vista sucia: «La cantidad de secreción microorganismos tendría que ser cuantiosa para contraer algo infeccioso. Lo único que puede pasar, y no tendría consecuencias clínicas, es que cogiese los microorganismos de los demás, aumentando la variedad de los tuyos, sobre todo los de la piel que fluctúan más».
El punto más crítico está en las zonas genitales donde es posible adquirir una infección genital o urinaria. Por eso los expertos recomiendan no quitarse la ropa interior cuando nos probemos ropa íntima, camisetas interiores y bañadores. En definitiva, cualquier prenda que tenga contacto directo con nuestra piel.
El resto de tipos de prendas el contacto es tan mínimo que sería extraño que pudiéramos contagiar con algo.
Además de emplear ropa propia bajo la nueva en los probadores, los expertos también recomiendan lavarse las manos después de ir de compras. Ya que así minimizaríamos aún más el posible contagio.
Lavar antes de usar
Para evitar infecciones de ningún tipo, lo más adecuado es lavar la ropa antes de usarla. Cuando compremos ropa conviene lavarla a la mayor temperatura posible antes de estrenarla. Sobre todo si se trata de prendas próximas a las axilas y nalgas.
De esta manera, lograremos eliminar cualquier rastro de la presencia de microorganismos. Ya que los investigadores constataron que los microorganismos pueden sobrevivir semanas o incluso meses en la ropa.
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