Todo lo que hemos oído sobre la sangre azul de la nobleza, ¿es cierto?. A lo largo de la historia se ha dicho que los miembros de la nobleza tienen habilidades especiales y diferentes al resto de los seres humanos, incluso hasta el color de su sangre es azul.
El origen de la expresión «tener la sangre azul»
Todos sabemos que la sangre de una persona sana es de color roja. Así pues, el origen de esta expresión se debe a que antiguamente, los reyes, nobles y aristócratas, al no ejercer las duras tareas que realizaban los campesinos a pleno sol día día, tenían la piel pálida, dejando traslucir las venas y predominando las azules.
Al estar expuestos al sol, los ciudadanos comunes del pueblo y los campesinos tenían una piel bronceada, lo que imposibilitara que se apreciara este fenómeno.
Por este motivo, era tan importante para la monarquía mantener la piel pálida, ya que, era el rasgo físico que los diferenciaba de los campesinos. Para ello, protegían siempre su piel con ropajes, sombreros y sombrillas.
El Príncipe azul de los cuentos
Se desconoce a ciencia cierta cuándo empezó a utilizarse el adjetivo ‘Príncipe Azul’ en los cuentos y cuál fue el primer protagonista al que se le adjudicó ese color.
Sin embargo, algunos historiadores sugieren que apareció en el siglo XIX por primera vez en una leyenda de origen rumano titulada «El Príncipe Azul de la lágrima».
De nuevo, el color azul hacía referencia a su condición aristocrática y por tanto, al color de su sangre.
Cabe destacar que el término «azul» para referirse a los príncipes de los cuentos se usa principalmente en la lengua española e italiana («Principe Azzurro«), mientras que en la mayoría de idiomas se refieren a ese personaje como «El Príncipe Encantador«.
¿Pero por qué las venas se ven de color azul si la sangre es roja?
La sangre de las arterias y cuando el oxígeno llega correctamente, es de color rojo brillante. Por otro lado, la sangre venosa y parcialmente desoxigenada se convierte en un color rojo oscuro y opaco. A causa de un efecto óptico por la forma en que penetra la luz a través de la piel, las venas se ven de un color azulado-verdoso. Por este motivo, las venas solo parecen azules cuando están situadas alrededor de 0,5 mm por debajo de la epidermis.
¿Existen personas que realmente tienen la sangre azul?
Por increíble que parezca, la respuesta es sí y no se debe precisamente a una condición aristocrática, sino a un problema de salud.
La sulfohemoglobinemia es una condición rara que se produce cuando existe un exceso de sulfohemoglobina en la sangre.
La pigmentación de la hemoglobina se torna verdosa o azul, no puede revertirse a un estado normal y pierde su correcto funcionamiento causando cianosis incluso en bajo niveles.
Esta anomalía ocurre cuando los átomos de azufre son incorporados dentro de la molécula de hemoglobina. Cuando el ácido sulfhídrico se combina con los iones de hierro de la sangre, ésta ya no es capaz de transportar oxígeno.
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